Construye un nido de barro característico de forma globular con entrada lateral del tamaño de una pelota de fútbol, en el interior las aves construyen un tabique o pared divisoria por la cual se entra a la cámara de postura propiamente dicha. De acuerdo a la disponibilidad de los materiales el ave tarda entre seis y ocho días en construirlo. Fue elegida ave de la patria, a través de una encuesta realizada por el diario La Razón y la Asociación Ornitológica del Plata, entre abril y junio del año 1928.
Folklore: se dice que a los horneros no hay que matarlos, y que su nido construido cerca del Hombre trae buenos augurios. Además un dicho popular recuerda que donde el hornero construye su nido no caen rayos ni centellas.
La popularidad del Hornero, que los científicos denominaron Furnarius rufus no terminó en aquella encuesta. Escritores y poetas como Enrique Larreta, D. Faustino Sarmiento, Enrique Hudson, Leopoldo Lugones, Juan Burghi etc. lo recordaron en hermosísimos escritos literarios como asimismo en emocionadas poesías.
donde se ilustra además un nido de hornero.
La Asociación Ornitológica del Plata (hoy Aves Argentinas), entidad casi centenaria dedicada al estudio de las aves en nuestro país, ha concedido el nombre “El Hornero” a su revista de difusión científica. Asimismo el logotipo representa el ojo de un observador que está viendo un nido con una de estas aves.
Las imágenes de los hornillos retratadas por turistas extranjeros en la famosa Pirámide de Mayo o en las cornisas de los edificios más emblemáticos de nuestra ciudad han dado la vuelta al mundo. Además, sus nidos construidos en los lugares más inverosímiles forman parte nuestro folklore e ilustran fotográficamente excelentes publicaciones. También circuló durante algún tiempo una moneda de ½ centavo que, aunque devaluado lo representa.
Sobre primer día de emisión de la serie Pro Infancia emitida en 1966. La estampilla de correo aéreo ilustra dos horneros junto a un nido. Esta estampilla es lo que se llama “semipostal”: Costaba 40 pesos, de los cuales 27,50 servían para pagar el franqueo y los otros 12,50 eran destinados a obras de beneficencia. Tuvo una tirada de 200.000 ejemplares.
Anteriormente, en 1932, las oficinas de Correos habían emitido una serie que salió a la venta entre los días 10 de diciembre y 15 de enero del siguiente año. Esta estampilla de beneficencia que ilustra a una pareja de horneros que construyó su nido sobre un poste de luz, otro de los lugares extraños en donde suelen anidar.
Es una impresión a beneficio de una Asociación que lucha contra la tuberculosis y el importe total de la estampilla se destina a dicha organización. A diferencia de la anterior, no sirve para el correo. Su única coincidencia es el aspecto, similar al de una estampilla tradicional. Si bien tiene en su parte superior un matasellos, seguramente se debe a que la estampilla fue colocada en un sobre como publicidad, no como franqueo.
Emisiones de Brasil y Uruguay sobre el hornero.
Al estar distribuido por grandes regiones de Sudamérica, han sido varios los países que muestran al hornero en sus estampillas.
Nota escrita en colaboración con Horacio Aguilar
2 comentarios:
Simpático animal el hornero... me gustó la del nido en el poste luz.
Se aprende mucho en cada publicación :)
¡Saludos!
Gracias por el link.
Ahora... Al que hizo la estampilla de Hudson ¿no podían mostrarle alguna foto?
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