viernes, 12 de septiembre de 2008

La batalla del Río de la Plata y la tripulación del Graf Spee

En un foro de coleccionistas del que participo, surgió una discusión acerca de la historia postal vinculada al Graf Spee, principalmente sobre el correo enviado por la tripulación internada en la Argentina. Esta es mi humilde colaboración sobre el tema, más vinculada a la historia del barco en sí que a la posterior de su tripulación.

El 20 de agosto de 1939 (dos semanas antes del inicio de la segunda guerra mundial), el Graf Spee partió de Alemania con rumbo al Atlántico Sur, con órdenes de atacar el tráfico marítimo británico en caso de que se declarase la guerra entre Inglaterra y Alemania. Desde septiembre y hasta principios de diciembre cumplió exitosamente su misión, hasta que el 13 de diciembre fue interceptado por una flotilla británica compuesta por los buques Achilles, Ajax y Exeter. Siendo superado por la fuerza de sus enemigos y gravemente averiado, el Graf Spee se replegó hasta el puerto neutral de Montevideo para efectuar reparaciones. El Achilles y el Ajax lo siguieron a corta distancia, en tanto que el Exeter, seriamente dañado, se replegó a las Islas Malvinas.


El gobierno uruguayo, que era pro-británico, sólo dio al Graf Spee 72 horas para realizar las reparaciones. Pasado dicho lapso, el barco debía zarpar o ser internado por Uruguay (es decir, custodiado por el gobierno uruguayo hasta el final de la guerra). Esta última opción era inaceptable, ya que seguramente Uruguay permitiría a Inglaterra conocer los secretos tecnológicos del buque, lo que pondría en riesgo a los buques similares que operaban en el Atlántico Norte, además de ser una pésima propaganda. Mientras tanto, al Achilles y al Ajax que aguardaban en la desembocadura del Río de la Plata, se sumó el destructor Cumberland, y los rumores indicaban que rápidamente también lo harían el Renown y el portaaviones Ark Royal. Ante la imposibilidad de abrirse paso hacia alta mar, el capitán del Graf Spee, dirigió el acorazado hacia aguas más profundas del Río de la Plata e hizo dinamitar el buque el 17 de diciembre, luego de evacuar a la tripulación, que fue llevada a Buenos Aires tras el naufragio. Lagsdorff se suicidó el 20 de diciembre en Buenos Aires. La tripulación, de más de 1000 hombres fue internada en diferentes puntos de la Argentina: Córdoba, Sierra de la ventana, Mendoza, entre otros. Debían permanecer en el país hasta el final de la guerra. Las condiciones de internación establecían que podían trabajar en la Argentina, pero no podían emplear uniformes o distintivos militares alemanes.
Durante los años siguientes, algunos de ellos principalmente oficiales de alto rango se escaparon a través de Chile y regresaron a Alemania para seguir el combate, aunque más de 800 se quedaron y se afincaron aquí; estableciéndose la mayor parte en el pueblo cordobés hoy conocido como Villa General Belgrano, donde la tradición alemana continúa siendo marcada, casi 70 años después.

Correspondencia enviada por un miembro de la tripulación del Graf Spee internado en la Argentina.
Notar la primera línea: "Correspondencia de prisionero de guerra"

1 comentario:

Rapote dijo...

Muy interesante Pablo.

Alguna vez leí algo pero lo tenía ya olvidado.

Un abrazo,
Rapote